martes, 4 de agosto de 2009

Sofía

Cómo explicar como te echo de menos, cariño. Los días sin tí no tienen el mismo color, tu risa es el motor de nuestras vidas, tus inmensos ojos azules me llenan de alegría.
Sólo me consuela saber que lo estás pasando genial con los abuelos en la playa y que pronto regresarás a mi lado.
Llegaste al mundo hace casi seis años, pero siempre quise tener una hija como tú. Eres mi sueño hecho realidad. Sabía como te iba a llamar desde que supe que quería ser madre.
Me encanta verte crecer y después de estos maravillosos años a tu lado sólo faltaba la llegada de nuestro pequeñín para rebosar de felicidad.
Sois el motor de mi vida, mi mayor tesoro. Supongo que no se puede explicar con palabras el sentimiento tan intenso y profundo que nace cuando se es madre.
Recuerdo mis embarazos como si los estuviera viviendo de nuevo. Esa sensación de plenitud... como me enseñasteis lo que es la ternura, la paciencia, el amor desinteresado, el verdadero. No sé como agradecer a papá... y gracias hijos por todo lo que me dais y enseñais cada día.















No hay comentarios: